lunes, 30 de agosto de 2010

IREMOS A CASA

Cruza la calle apresurado, de lejos ve la cúpula de la catedral donde debe esperar. La mañana ha amanecido caliente, húmeda, y ya a esta hora la gente camina más lento deteniéndose ahogada.
Piensa que el chaleco le está estorbando y que el bolso parece más pesado que otros días. Todo lo inquieta mientras el celular descansa aplacado y silencioso en su mano. Gotas de agua corren por los dedos. Recuerda que debe hacer varios llamados y terminar de organizar esas fotos que han quedado pendientes para la publicación del otro día. ¡Qué hermosas fotos! – expresa con una sonrisa que genera la mirada aturdida de una mujer mayor que se acerca. Es que en verdad son bellas, se disculpa con un mohín ridículo mientras la mujer se aleja.
Pensar que pasa por ese lugar a diario, bueno, no tan a diario pero sí con frecuencia. La plaza, el cabildo, las calles empedradas que más de una vez han sido causantes de un tropezón inoportuno, la marcha incesante de varias líneas de colectivos… pero hoy es distinto todo, ya no es un transeúnte más, hoy, espera.
La ansiedad lo embarga. Recuerda aquella vez en que su madre se atrasó y no llegó a tiempo a la escuela. Los chicos que formaban el cordón en la vereda iban rompiendo filas y las maestras iban saliendo en grupo hacia las calles tranquilas. Recuerda que fue su abuelo quien lo recogió ese día, y ya no recuerda más nada.
El cielo está espesándose. Unas nubes blancas y gordas se aproximan del este,la espera continúa, Cómo será ella?, se pregunta un poco inquieto. "Su voz suena muy sensual por teléfono y los mails son muy divertidos"- repite sonrojándose. Eso es lo que admira de una mujer, su sentido del humor y su inteligencia. Que blancas están las nubes, y hasta dibujan distintas formas, la trompa de un elefante, ahora un ángel con alas que se disuelve lentamente... De pronto, alguien lo toma de la mano y lo vuelve a la realidad. El abuelo que le dice: “Antonio, hoy, iremos a casa”.

2 comentarios:

  1. Vero, estuve viendo los blogs y advierto una búsqueda. Creo que en este, estás logrando el punto justo entre arte, divertimento y reflexión. Esta conjunción no es fácil. Si tuviera que darte alguna sugerencia, te diría que profundizaras en este. Las posibilidades son muchas. Me gustaría conocer tus fotografías. Saludos. Daniel

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  2. Querida Vero, recién he leído tu comentario que me incita a escribir sobre mi nombre.
    Estuve unos pocos días sin conexión por culpa de un rayo. También invocabas a los dioses, pero no quiero pensar que me aceche la ira de ninguno.

    Ya he leído algo de tus blogs. He visto cómo algunos alientos de Cuba te han llegado allá en Sur, de una manera que uno no supone que puedan arraigar.

    Un abrazo.

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